La música como aporte al desarrollo y la confianza

FOTORREPORTAJES DE PRIMERAHORA.CL

Proyecto financiado por FFMCS 2023

Hace 5 años que Coté Moreno, profesora de Canto de Surco Música, Escuela de Música Popular, llegó a Concepción, desde su ciudad de su ciudad de origen, Santiago. Confiesa que quedó impresionada con la cantidad de proyectos y espacios donde mostrar y difundir el arte musical, visual, artes escénicas y poesía, lo que cree que responde a un feedback entre la calidad de los artistas y su esfuerzo por impregnar a la región de magia, el interés y respeto que muestra la gente por conocer más y disfrutar el arte”.

Coté Moreno expresa que “creo que el talento regional es inmenso, y que sigue creciendo. En la escuela donde trabajo puedo verlo claramente. Es curioso ver cómo las personas llegan tímidamente a clases, de alguna manera preguntándose si sirven para esto, cuando muchos de ellos son ya muy talentosos. También puedo ver cómo ha impactado tener a disposición una escena activa, que los motiva e influencia. Sin dejar de lado la autenticidad de cada uno de ellos”.

En cuanto a las dificultades que enfrentan está, en primera instancia, la económica. “La mayoría de las escuelas tienen valores que no son accesibles para todos y todas, situación que responde al manejo de las políticas públicas, donde la educación artística es infravalorada y escasamente financiada; y si bien existen algunos lugares donde se puede acceder a formación, hay muchas y muchos que quedan fuera por rango etario, la distancia entre comunas, situación económica, etc”.

Coté Moreno agrega que, “si bien existe una oferta de profesores/as y escuelas, no tenemos una oferta de formación profesional en el área, tanto del canto, como de la música en general, por lo que muchas veces quienes quieren formarse profesionalmente tienen que irse de la región. Eso es algo en lo que estamos trabajando en la escuela surco, ya que gracias a dos importantes convenios hemos podido acceder a programas y planes de estudio de formación profesional. Por un lado, con un Diplomado Certificado junto a la OTEC Cultura y Territorio, y por otro, junto al Instituto Profesional Projazz, quienes nos abrieron las puertas de su programa educativo”.

Otro aspecto que destaca la docente de Canto es que: “es altamente relevante para mí como terapeuta, el cómo afecta la salud mental en los procesos de aprendizaje y del despliegue artístico. Sabemos que la calidad de la salud mental es resultado de muchas condiciones que construyen nuestra realidad, y bajo esta misma lógica, el estado de ésta impacta a todos los aspectos de nuestra vida. El aprendizaje y desarrollo musical no son la excepción. La falta de confianza, las dudas vocacionales, el pánico escénico, incluso el justificado temor a la inestabilidad económica, son motivos por los que muchas veces las personas experimentan malestar, frustración y poco disfrute, que en algunos caso desemboca en asuntos delicados como el consumo de sustancias o ya definitivamente, en el abandono los estudios o de la práctica musical”, sentencia Coté Moreno.

En cuanto a disparidad o discriminación, opina que “creo que existe cierta discriminación que nos separa de los no cantantes, suena raro decir no cantantes, porque generalmente se les llama instrumentistas, pero la voz también es un instrumento, y no de mayor o menor dificultad que cualquier otro. De alguna manera, nos dejan en un nivel diferente”. 

Añade que “otra cosa, es que el ser cantante está asociado a la mujer, o, si eres mujer tienes que ser cantante o tocar instrumentos considerados femeninos. Existen ejemplos concretos de artistas actualmente reconocidas, como Melisa Aldana, o internacionalmente, la guitarrista Emily Remler, que tuvieron que pasar experiencias de ese tipo durante su formación, y que demostraron que el ser mujer no condiciona sus capacidades. Pero creo que en muchos casos sí merma la motivación, por miedo a ser discriminadas o porque, derechamente, no hay un contexto que le ofrezca la posibilidad siquiera de imaginar una formación musical”.

La cantante expresa, además, que “algo que pasa también es que se asume que ser por mujer y especialmente ser mujer cantante no sabemos de música, teoría, etcétera, y si bien, por todo lo que mencioné antes, es muy frecuente que esto sea en parte una realidad. No tiene que ver con el hecho de ser cantante ni por tener menos capacidades, sino por falta de oportunidades y contextos que impulsen una formación más completa. Creo que es importante dejar de asumir, y más bien proponer e impulsar el crecimiento de todas y todos como músicos, es la única forma de terminar con el estigma, y esto es una tarea compartida”.