El aumento en el precio de los huevos durante las últimas semanas ha generado preocupación en los consumidores. Ante ello, el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, explicó que esta alza responde a un fenómeno estacional: la menor cantidad de luz solar en invierno afecta la producción de las gallinas ponedoras, lo que reduce la oferta mientras la demanda se mantiene estable.
Durante una visita a Los Ángeles, en la Región del Biobío, Valenzuela indicó que esta situación es «normal» en los meses fríos, y que hacia fines de julio, cuando aumentan las horas de luz, la producción vuelve a niveles habituales, lo que podría estabilizar los precios.
Según datos de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), el valor promedio de la docena de huevos blancos en ferias bordea los $3.274, mientras que los de color alcanzan los $3.700. Actualmente, el consumo per cápita en Chile llega a 250 huevos al año.
El ministro destacó además la versatilidad del huevo en la cocina y sugirió prepararlos al estilo “ranchero”, incorporando ingredientes como tomate, ajo y ají. También propuso combinarlos con acelga o cebolla como opciones sabrosas y nutritivas.
Producción garantizada
Pese a la tranquilidad que intenta transmitir el Gobierno, el gremio Chilehuevos advirtió recientemente que la industria se encuentra operando al límite de su capacidad productiva. Desde la entidad señalaron que el precio del huevo ha aumentado más de un 8% en lo que va del año, y parte de la problemática se vincula a la llamada “permisología”, especialmente a los procesos asociados al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), que han ralentizado nuevos proyectos productivos.
Desde el Ministerio se enfatizó que existe una cooperación público-privada con los productores para asegurar el abastecimiento nacional, dado que el huevo es un alimento esencial en la dieta de las familias chilenas, valorado por su alto contenido en proteínas, vitaminas A, B y D, y su adaptabilidad a múltiples preparaciones.