La Universidad del Bío-Bío (UBB) enfrenta una severa crisis institucional tras la publicación de un informe de la Contraloría General de la República que detectó desvíos de fondos públicos, contrataciones con conflictos de interés y pagos irregulares.
El organismo fiscalizador reveló que la UBB adeuda más de $6.800 millones al Fondo Solidario de Crédito Universitario, monto que incluye $3.000 millones desviados desde cuentas de proyectos estatales a la cuenta de sueldos de la institución. Aunque esos recursos fueron posteriormente restituidos, la Contraloría calificó el hecho como «improcedente» y contrario al principio de legalidad del gasto público.
El informe también evidenció contrataciones al margen de la Ley de Compras Públicas, por más de $33 millones, y vínculos familiares entre autoridades universitarias y empresas contratadas. Además, se identificaron nueve contrataciones a honorarios de personas con lazos de parentesco con directivos, infringiendo normas básicas de probidad administrativa.
Por estos hechos, se instruyó la apertura de sumarios y se remitieron antecedentes al Ministerio Público para indagar eventuales delitos.
En respuesta, la UBB anunció el inicio de investigaciones internas y se comprometió a regularizar la deuda. A través de un comunicado, la casa de estudios aseguró que esta situación es común en el sistema universitario público y que se han adoptado medidas para reducir la deuda histórica.
La Superintendencia de Educación Superior también fue instruida a fiscalizar el caso en un plazo de 60 días.