Peritajes del buque «Cobra» confirmarían impacto directo y abren camino a posibles indemnizaciones

Las pericias realizadas este fin de semana en el dique flotante ‘Mery’ de Asmar, en Talcahuano, confirmaron que el buque industrial «Cobra» chocó directamente con la lancha artesanal «Bruma», desaparecida con toda su tripulación.

Más de 70 funcionarios de la PDI, peritos de la empresa Blumar y expertos contratados por las familias participaron en las diligencias, coordinadas por la Autoridad Marítima. El abogado de los familiares, Rafael Poblete, aseguró que el daño en el sonar y el domo del «Cobra» es evidente: “Las marcas del impacto son claras y directas”, dijo.

Los familiares también realizaron una simulación del recorrido nocturno que habría hecho la «Bruma», usando una lancha de tamaño similar. El objetivo fue demostrar que la embarcación era visible desde el «Cobra», lo que refuerza la hipótesis de una colisión evitable.

En paralelo al proceso penal, las familias evalúan solicitar la comprobación judicial de la muerte de sus seres queridos, figura legal que permite acreditar el fallecimiento sin que el cuerpo haya sido hallado. El académico Manuel Barría explicó que esta vía es más rápida y directa que la tradicional “muerte presunta”, utilizada cuando alguien desaparece por largo tiempo sin rastro.

Esta declaración permitiría avanzar en trámites civiles y abre la posibilidad de demandar indemnizaciones.

Barría también señaló que, si se confirma responsabilidad del «Cobra», la empresa dueña podría enfrentar demandas por indemnización de perjuicios y lucro cesante futuro. Este último implica compensar a los familiares por los ingresos que la víctima habría generado hasta su jubilación, como ocurrió tras el accidente aéreo en Juan Fernández en 2011.