La defensa del buque pesquero «Cobra» apuntó directamente a la tripulación de la lancha «Bruma», naufragada con siete pescadores a bordo, por su ubicación en altamar y la falta de un vigía permanente.
Alejandro Espinoza, abogado del «Cobra» —nave industrial de la empresa Blumar—, valoró las pericias realizadas por la PDI y por personal del propio buque, y pidió investigar a fondo las causas del accidente. “Es fundamental aclarar si se cumplían las medidas de seguridad para evitar colisiones”, declaró.
El abogado recalcó que, aunque se confirme una colisión entre ambas embarcaciones, eso no implica que la responsabilidad sea automáticamente del «Cobra». Según él, los sistemas de detección y prevención de colisiones del buque estaban en funcionamiento y la tripulación cumplió con todas las normas de navegación vigentes.
En contraste, Espinoza criticó duramente a la tripulación de la «Bruma». Cuestionó por qué no reportaron su ubicación en una zona de alto tráfico marítimo ni mantuvieron un vigía permanente, algo exigido por ley. “¿Por qué se fondearon en esa área sin dar aviso por el canal 16? Son omisiones graves en materia de seguridad en altamar”, sentenció.