El docente, historiador y abogado presentó su libro “Biobío y Ñuble: Bibliografía Histórica Regional”, una obra con la que pretende dar una mirada a la memoria común, y desde allí construir un futuro compartido. Durante la actividad, el autor recibió el apoyo de la Universidad de Concepción para su postulación al Premio Nacional de Historia.
Por Constanza Pereira
Una obra que pretende entregar una mirada panorámica a la biografía histórica de la región. Así define Armando Cartes Montory su nuevo libro “Biobío y Ñuble: Bibliografía Histórica Regional”, esto porque incluye textos de sociología, antropología, la mujer, medio ambiente y muchas otras disciplinas. Una recopilación de más de 6 mil investigaciones.
En este sentido, Cartes añade que “la biografía que se ha acumulado en el Biobío y Ñuble a través de 200 años de historia -incluso más allá porque hay textos coloniales que también pueden ser útiles- podrían facilitar la investigación, conocer un gran patrimonio de cultura impresa, difundir la creación de los cientistas sociales en la región y con eso preparar el camino para mejores historias con un sentido mucho más profundo, que es construir una identidad regional más fuerte que permita, desde una base sólida, construir un futuro compartido. Este registro será clave para futuras investigaciones”.
Bajo este contexto, la Universidad de Concepción y el Gobierno Regional, dieron su apoyo al académico, que cuenta con una amplia trayectoria profesional, para su postulación al Premio Nacional de Historia 2022.
El académico argumenta que esta nominación y el apoyo recibido tiene un significado especial, ya que la UdeC ha estado presente a lo largo de su vida, junto con el trabajo que ha realizado en la institución.
Sobre la nominación, en tanto, cree que tiene mucha relevancia dado que “somos la región contrapeso de Chile”, agrega.
Destaca el trabajo de cerca de 30 años, más 30 libros, junto con esto un trabajo con la comunidad, con equipos, que han sido valorados y reconocidos. Asevera que es importante que “haya más publicaciones fuera de Santiago para ayudar, por ejemplo, a temas de rescate patrimonial que está tan postergado en nuestro territorio. Por eso, esto me anima también para seguir aportando, a la región, a la universidad y por supuesto a mi ciudad”.
Su trayectoria le permite entregar algunas palabras a los futuros historiadores recalcando la importancia de continuar con el estudio de la historia. “Les diría que más que nunca en este mundo globalizante, en esta uniformidad impuesta por las redes es necesario saber quién es uno, dónde está y de dónde venimos, porque ningún árbol es frondoso ni fuerte si no tiene una raíz potente, y esa es nuestra historia, el pasado compartido”.
Confirma, además, que la historia se encuentra presente no solo en los estudiantes sino también en la gente. “Veo mucho interés en la historia, no solo en mis alumnos de diferentes carreras, sino también en el público en general que compra los libros, que llama y consulta. Hay mucha gente que disfruta conocer el pasado y siente que es importante”.
Menciona, además que, entre todos sus textos escritos hasta ahora, su primer libro “Pedro del Río Zañartu, Filántropo, Patriota y Viajero Universal”, donde estudió su vida, época y pensamiento, lo atesora y recuerda con cariño. Junto con diversos ejemplares tales como “Concepción contra Chile”, que habla de la independencia desde una mirada original entendida como un conflicto entre las provincias centrales de Santiago y Concepción; y “Región y Nación” donde se encuentran análisis de 14 autores, entre ellos premios nacionales, de sus respectivas regiones.