La Región del Biobío registró una tasa de desocupación del 9% en el trimestre móvil marzo-mayo de 2025, de acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). La cifra representa un incremento de 0,3 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año anterior, evidenciando una creciente presión sobre el mercado laboral regional.
El aumento responde a un crecimiento de la fuerza de trabajo (0,7%) mayor al de la población ocupada (0,4%), lo que se tradujo en un alza del 3,8% en el número de personas desocupadas. Esta tendencia sugiere que el mercado laboral no ha logrado absorber a quienes se han incorporado recientemente en busca de empleo.
Construcción y empleo doméstico impulsan el trabajo formal
Entre los sectores que mostraron mayor dinamismo en la generación de puestos de trabajo destacan los servicios domésticos en hogares, con un alza del 32,5%, y la construcción, que creció 8%. A nivel ocupacional, los asalariados con contrato formal aumentaron 1,4%, mientras que el empleo en labores domésticas experimentó un repunte del 20,3%.
Pese al panorama de aumento en la desocupación, la informalidad laboral mostró una leve mejoría. La tasa de ocupación informal retrocedió a 25,3%, lo que representa una baja interanual de 1,2 puntos porcentuales. Las personas ocupadas en condiciones informales disminuyeron en un 4,1%, con descensos tanto en hombres (-3,4%) como en mujeres (-4,9%). Los trabajadores por cuenta propia fueron los más impactados, con una caída del 8,1%.
Si bien la reducción de la informalidad es una señal positiva, persisten brechas significativas entre hombres y mujeres en cuanto a oportunidades y condiciones laborales. El desafío para las autoridades y actores del mundo del trabajo sigue siendo generar empleo de calidad y disminuir la desigualdad estructural en el acceso al mercado laboral.