Más de 80 personas que acusan haber sido víctimas de una presunta estafa por parte de la automotora Autal, que operaba en Concepción y Coronel, manifestaron su preocupación por la lentitud en el avance de la investigación judicial. El caso, que involucra una deuda superior a los 500 millones de pesos, comenzó a conocerse a inicios de este año.
La automotora, que mantenía sucursales en Lomas de San Andrés (Concepción) y en Coronel, cerró repentinamente sus puertas dejando a decenas de clientes sin respuesta, muchos de los cuales entregaron sus vehículos en consignación o realizaron compras que nunca se concretaron.
Julio Rodríguez, vocero de los afectados, señaló que ya se han presentado más de 80 denuncias, mientras que la empresa continúa inubicable. “La situación es desesperante. Hay familias completas que perdieron sus ahorros y hasta ahora no vemos resultados concretos por parte de la justicia”, sostuvo.
El abogado Cristóbal Cifuentes, quien representa a un grupo de afectados, informó que se han presentado al menos ocho querellas, aunque hasta el momento no han podido acceder a la carpeta investigativa del caso. “Nos preocupa la falta de celeridad, considerando la magnitud del daño económico”, indicó.
El cierre de la sucursal de Concepción en enero pasado marcó el inicio de la seguidilla de denuncias contra Autal, que hoy enfrenta cuestionamientos por una posible estafa de gran escala en la región del Biobío. Los afectados continúan exigiendo justicia y el esclarecimiento de los hechos.