El embajador de China en Chile, Niu Qingbao, destacó este jueves la rápida reacción del Gobierno tras el atentado incendiario que destruyó 52 máquinas en la central hidroeléctrica Rucalhue, en Santa Bárbara.
“Lamentamos profundamente este tipo de ataques. Nos duele lo ocurrido, enviamos nuestros saludos a los heridos y sentimos las pérdidas”, expresó el diplomático, a través de un intérprete.
Qingbao valoró que el Gobierno haya tomado medidas inmediatas: “Vemos con urgencia que el Estado está actuando. El Ministerio de Seguridad Pública, el de Relaciones Exteriores, e incluso el Presidente han condenado lo ocurrido e invocaron la Ley Antiterrorista”.
El ataque afectó a una filial de China International Water & Electric Corp (CWE), dueña de las obras. Desde la Embajada advirtieron que hechos como este “socavan gravemente la confianza de las empresas chinas en la seguridad y el entorno para invertir en la región”.
Durante la jornada, el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, se reunió con empresarios chinos y el embajador en la Delegación Presidencial de Biobío, en Los Ángeles. En la cita, Qingbao reiteró su respaldo a la decisión del Ejecutivo de aplicar la Ley Antiterrorista.