Tras el anuncio de aranceles recíprocos de Donald Trump, expertos advierten que los consumidores estadounidenses serán los primeros en sentir el impacto, con alzas inmediatas en productos clave.
Productos como café, azúcar, arroz y frutos secos, mayormente importados, subirán de precio casi de inmediato. Cafeterías y pequeños comerciantes ya anticipan alzas permanentes si los aranceles se mantienen. Además, costos indirectos como el combustible y repuestos también encarecerán la cadena de distribución.
El 97% de la ropa vendida en EE.UU. proviene del extranjero. Marcas como H&M, Gap, Amazon y Walmart verán subir sus costos, al igual que plataformas como Shein y Temu, que perderán beneficios arancelarios.
La mitad de los vehículos vendidos en EE.UU. son importados. Incluso los ensamblados localmente dependen de piezas extranjeras. Se proyecta que el precio promedio por unidad aumente en unos $6.000, afectando especialmente a modelos más económicos como los SUV compactos.
Los dispositivos electrónicos, especialmente los iPhones fabricados en China, enfrentan ahora aranceles del 54%. Aunque aún hay inventario para unos cuatro meses, los precios podrían dispararse justo para la temporada de verano y el regreso a clases.